Obviamente fue obra de Christopher.
Pensando en esto, siguió el olor y vio la ocupada figura de Christopher en la cocina.
Ella sonrió alegremente, se acercó en silencio y extendió la mano para cubrirle los ojos. "¿Adivina quién?"
"Un gato codicioso". Dijo Christopher.
"Eres mala." Janice lo fulminó con la mirada antes de soltarlo y lo abrazó por detrás. "¿Por qué no me despertaste?"
"No quería molestarte ya que dormías tan profundamente."
"Pero ya es muy tarde. Aún no hemos visitado a tu abuelo".
Al escuchar esto, Christopher se dio la vuelta y la miró, "He ido a visitar al abuelo, no te preocupes".
Después de decir eso, se dio la vuelta y fue a remover la comida en la sartén.
Janice asintió y echó un vistazo más de cerca a la olla. "¿Qué cocinaste?"
"Algo bueno para tu salud". La miró significativamente.
Janice comprendió al instante y se sonrojó.
Los dos se sentaron a la mesa del comedor y Christopher le sirvió un gran plato de sopa.
Janice miró la sopa bien caliente en