Lisandro no entendió por qué Ximena estaba tan furiosa. Le preguntó qué sucedía, pero ella no respondió. Le envió una ráfaga de mensajes explosivos, haciendo vibrar su pantalla. Lisandro, abrumado, sintió la intensidad de su enojo.
Jorge, a un lado, notó a Lisandro sonriendo y trató de echar un vist