Ramón salió apresuradamente en busca de Lisandro. Ximena se interpuso rápidamente.
—Señor, ¿qué pretende hacer?
—¡No es asunto tuyo! ¡Apártate! —Le respondió bruscamente.
—¡Hablemos con calma! La persona que chocó contigo fui yo, no mi esposo. Él no sabe nada de esto, no tiene nada que ver con lo su