Lisandro, llevando consigo a Ximena, volvió a encontrarse con Fabiola. En privado, Daniel le dijo a ella.
—¡El jefe nunca ha querido meterse en los asuntos ajenos! La gente con alto poder, por lo general, es distante y carece de calidez humana. ¡No esperes que muestren un sentido de justicia frente