Mundo ficciónIniciar sesiónTodos estamos de acuerdo. Debemos estar en la habitación de la princesa Alis al amanecer, cuando aparezcan las damas de compañía para que nadie se percate que falta.
—Mandaremos los mensajes y lo haremos rápido. Sirius, puedes empezar tú a transformar el castillo como quiere mi Sol, que sabes más que yo de eso. Que sea muy lujoso —ordena Arni enseguida. — Deja de llamarme así o te delatarás frente a tu Tua Cantante. Dime Árnyék si no quieres decirme Arni.—De acuerdo, señor… digo Árnyék —río al ver lo nervioso que está Sirius. — Perdón… ya me acostumbraré a decirle su nombre; no se preocupe, no lo haré quedar mal. En lo que Sirius, que de a poco sigue aprendiendo a dominar los grandes poderes que le otorgara el príncipe, se dedica a cambiar el castillo, Arni y yo les man






