Capítulo 93. ¿Dónde estás?
Mariana se sorprendió un poco cuando lo escucho decir estas palabras, e inmediatamente le dijo bájame que yo pagaré la cuenta por ti.
Sin embargo, Pablo la miró y le preguntó: ¿estás pensando que soy del tipo de hombre que se va de un lugar sin pagar la cuenta?
Mariana, sin dudarlo ni un poco, asintió con su cabeza.
Pablo, en ese instante, le volvió a hacer otra pregunta: ¿tan mal hombre me veo ante tus ojos?
Ella volvió a asentir con la cabeza, él seguía caminando, luego solo le dijo: déjalo así, tu forma de pensar sobre mí, ya no tiene remedio alguno, ¿cierto? Después le explicó que este restaurante le pertenecía a su familia.
Mariana reflexionó un poco y enseguida dijo: no parpadeaste, cuando yo me puse a pedir como una loca lo más caro que había en la carta.
Cuando llegaron donde habían dejado el coche había un tipo vestido con uniforme de chofer y se le acercó a Pablo, diciéndole señor, esta son las muletas que me pidió que le trajera hasta aquí.
Pablo inmediatamente puso a Mar