Llego al otro día contento a su oficina le llegaba el olor a café recién hecho, se quedó parado en medio camino, sus empleados lo miraban que tenía cerrados los ojos aspirando el aroma a café, sonreían todos de verlo, era un poema y ya se estaban dando cuenta por quién lo hacía, porque desde que llego Arlenn ahora es más alegre que antes y no lo disimula, casi al llegar a la puerta Arlenn salía y al verlo dijo.
—Buenos días, mi jefe guapetón —Y Él le respondió
—Buenos días, Arlenn — y delante de todos le dio un beso en la mejilla que la hizo ruborizarse, todos vieron eso y miraban divertidos, Arlenn les había caído bien a todos allí
Entro Hadrien tarareando una canción y Arlenn camino a sacar unas copias, Ada la siguió, espero que ponga los documentos para sacar copia y le pregunto.
—Arlenn ¿sabes por qué está alegre el jefe?
—La verdad no sé por qué, más tarde en el receso les cuento algo si es que me doy cuenta
Ada sonrió y comento
— Espero noticias tuyas, aquí todos estamos extrañad