Eran las cinco de la mañana cuando Aly recibió golpes de su esposa.
- Mi amor, despierta, voy a dar a luz… le dijo a su esposo.
Aly salta de la cama asustada otra vez
- ¡¡Qué!!
¿Vas a dar a luz ahora?
- Se me está rompiendo fuente, date prisa
- Ve calmate mi bebe
- Vete a la mierda, estoy sintiendo dolor por tu placer, me embarazaste y me dices que me calme... dijo al borde.
El dolor lo estaba irritando, Aly saca la bolsa que habían preparado para el bebé y nuevamente ayuda a su esposa a subir al auto rumbo a la clínica.
Ella fue atendida nuevamente una vez en el hospital.
Ella estaba dando a luz, Aly tuvo el privilegio de asistir al nacimiento de su esposa, algo muy raro en Senegal.
Khadija sostuvo firmemente la mano de su esposo mientras empujaba.
- Adelante mi amor, eres fuerte, puedes hacerlo adelante, concéntrate.
Empezó a empujar de nuevo, es en estos momentos que uno se da cuenta del respeto que le debe a la mujer, a la madre en particular, ella arriesga su vida dando vida, se