Capítulo 91.- Tú no eres así.
Oliver.
Después de ver la cara del mismo miedo impregnada en Leonel, siento una satisfacción que tenía mucho sin saborear.
— No sé dónde te hayas criado— Continúo ignorando el ruido incesante de cadenas golpeándose entre sí— pero según tengo entendido cuando te saludan lo correcto es responder con la misma amabilidad.
Comienzo a negar con la cabeza para acercarme de manera sigilosa, justo hasta estar a unos pocos centímetros del rostro del monstro.
Levanto la mano y le quito el paño que está amarrado en su boca, lo cual impide que haga berridos innecesarios.
— ¿Qué chingad0s crees que haces Oliver? — Pregunta Leonel de manera altanera, aunque no puede moverse demasiado ya que todas sus extremidades están amarradas a cadenas. — ¡Degraciad0, malnacid0! Suéltame para darte tu merecido.
— ¿Yo? — Pregunto haciéndome el occiso— Solo visito a mi querido suegro.
— ¡No puedes hacer esto, no puedes hacérmelo… Date cuenta lo que pasará después, lo que pensará Evelia de ti! — Grita lleno de confia