Evelia
Al encontrarme con esa mujer en la habitación de Oliver y enviar a los guardias detrás de ella, no pude hacer otra cosa que no fuera correr a confirmar si mi esposo se encontraba bien, pero al abrir la puerta todos los sonidos de las maquinas que lo estaban monitoreando me envolvieron.
— ¡¿Qué pasa?! ¡Oliver!— Grito de manera desesperada.
Pero antes de tener cualquier reacción un grupo de enfermeras y doctores aparecieron por la puerta haciéndome a un lado.
Por lo visto les había llegado una notificación de la urgencia.
— ¿Qué sucedió?— Me cuestiona un doctor.
— No lo sé, solo se — Digo llena de pavor al ver a mi esposo lleno de médicos con la cara concentrada en no dejarlo ir— Que alguien que no lo quiere estuvo a solas con él, no sé qué pudo haberle hecho.
Comenzaron a ponerle medicamentos con unas jeringas y sacarle sangre con otras, se veía completamente surrealista y en ese momento que me quede petrificada, uno de los guardias que me acompañaba me saco de la habitación con