Baltazar Licaon
— No me comas, no me comas lobito.... — susurra, pero no puede hacer nada, está debajo de mi.... Es tan jodidamente pequeña, con un mordisco arrancaría su cabeza..
Veo sus ojos como la luna y decido terminar de jugar, lamo su mejilla y mientras cierras sus ojos me convierto de nuevo en humano.
— Buu... — Digo sobre ella, quien abre los ojos y me ve de arriba abajo, se pone roja como un tómate y sonrío al saber que ahora estoy desnudo.
— ¿Eras tú? — pregunta aún debajo de mi, entierro mi cara en su cuello y aspiro su deliciosa esencia.
— ¿Quien si no...? — le digo con voz amortiguada.
— Estás loco! Pensé que me ibas a comer.... — se coloca sobre sus codos lo que me hace verla aún más cerca.
— Ganas no me faltan de hacerlo ¿Te gustaría? — le doy la una sonrisa de medio lado y se vuelve a poner roja.
Carraspea y ve el paisaje — Pensé que te habías ido — habla bajito...
— Ummm... — jamás había conocido a alguien con tantas ganas de que me aleje, mi buen humor s