>>> Reina Luna Adalet:
¡Mi corazón latía desenfrenado, como si quisiera escaparse de mi pecho!, me sentía nerviosa, carajo… ¡Mis manos estaban sudando!
Mis ojos se posaron en el cielo… Era una magnífica noche, y no, no cualquiera noche.
Mientras caminaba por ese hermoso sendero empedrado y árboles altos en ambos costados que mecían mi largo cabello rubio suelto, mis ojos verdes esmeraldas se posaron en la luna.
Una luna dorada, magnífica, más bella que ninguna otra para los hombres lobos de esta manada.
Se dice que el primer Alfa bendito por la diosa obtuvo su preciado don divino bajo una de estas lunas.
"Diosa…"
Pensé, pero… Ni siquiera pude terminar el pensamiento… Mi vista se tornó borrosa.
—Oh, demonios, no puedo llorar… No hoy, no esta noche, una Reina Luna es fuerte.
Me repetía a mí misma.
El sendero que se extendía ante mí era de varios kilómetros que serpenteaban por la ciudad de la manada. Iba desde el castillo del Alfa, hasta el templo central, y sí… ¡Yo t