Capítulo 50: Castigo al perdedor.
Adalet se llenó de incredulidad. No podía creer lo que escuchaba.
—¿Involucraste a mis cachorros en esto?
—¿No deberías estar agradecida, Luna?, te estoy permitiendo verlos. Si ganas, dejaré que pasen el día contigo, mientras trabajas en averiguar algo de los símbolos.
"¿Símbolos? ¿Habla de la mentira que saqué sobre su marca m@ldita? ¡No sé ni un carajo de ella! ¡Ni siquiera la he podido analizar bien!, será… ¿Él está sospechando y por eso hace todo esto?"
Pensaba Adalet confundida. Su corazón latiendo aceleradamente… Y lo único cierto que sabía… ¡Esque no quería verse menos o humillada delante de sus bebitos!
—Zefor… —lo llamó ella, su voz apenas un susurro.
Él se acercó a ella a pasos lentos.
—¿Pasa algo, Luna? —dijo, aunque su expresión era seria, su tono mostraba una pizca de diversión.
¡Adalet apretó sus manos en puños!, tomó un profundo suspiro, y levantó la mirada.
—¿Realmente no lo hiciste a propósito? ¿De verdad no estás apoyando con juegos sucios y bajos