Capítulo 525
A mitad de la película, el cansancio me invadió y apoyé la cabeza en su pecho. Los latidos de mi corazón empezaron a sincronizarse con los suyos. “¿Estabas enfadado?”, murmuré.

“¿Por qué?”, preguntó en voz baja, con su aliento agitando suavemente mi pelo.

“El médico no te reveló el sexo del bebé porque hablé con él”. Sonreí y solté una leve risita.

“Ya me lo imaginaba”. Parecía entretenido. “¿Has pensado en algún nombre?”, preguntó.

“Es difícil cuando todos los nombres que me gustan me recuerdan a alguien. Me gusta Ajax para niño e Isla para niña, pero esos nombres eran de unos de mis matones”. Sonreí.

Me miró y preguntó: “¿Entonces no puedo contribuir en nada?”. Pude percibir la diversión en su tono.

“Adelante, ¿qué tienes pensado?”, le pregunté. Seguro que no se le ocurrían nombres más ridículos.

“Si es niña, Fiorella o Cenzia, y si es niño, Alexander y Caspian”, respondió lentamente. Santo cielo.

“Me encanta el nombre de Alexander”, sonreí.

“¿En serio?”, preguntó mirá
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App