Me quedo callado porque no sé qué decir, ya sea que me quede aquí en el negocio o me vaya con el de papá, las cosas van a ser iguales, él seguirá con su vida y yo seré quien se haga cargo del negocio y es lo que estoy evitando, antes me gustaba ser el jefe, pero ahora yo también tenía una familia que necesitaba mi tiempo y dedicación. Una esposa y una hija que venía en camino y que me querían temprano en casa, un fin de semana libre y unas vacaciones solo para ellas, Fabián no me estaba hablando de nada de eso, solo tenía miedo de que yo dejara el negocio, quería escuchar de sus labios que no me fuera de la empresa y que íbamos a sacar está mierda juntos y si no lo escuchaba decir eso, no pensaba quedarme aquí.

Le digo que voy a pensar en ello, quiero que en este tiempo sienta la presión que siento yo de tener tanto trabajo y contratos, que cumplir inspección, que hacer en las obras y lidiar con trabajadores y obreros que muchas veces hacen caso omiso de mis órdenes, el cómo mi socio