- ¿Ya me puedes decir que fue todo eso?- me pregunto Alonso sin despegar su vista de la carretera.
Ibamos a medio camino, todo estaba en silencio pero no uno incómodo, el problema era que ninguno sabía que decir, así que nadie hablaba, hasta que Alonso decidió hablar con su pregunta.
- Podría pero...mejor no- una leve risa salió de sus labios mientras negaba con la cabeza, sin darme cuenta tomó su mano con la mía y me miró por un rápido momento.
- Por favor- suplicó con un puchero y yo me rendí.
- Bien, cuando las chicas y yo salimos a comer empezaron a hablar sobre sus fantasías... sexuales... contigo y eso me molestó mucho - dije cruzando me de brazos, lo miré de reojo y pude ver que en su cara aparecía una sonrisa.
- ¿De que te ríes? - pregunté con un tono enfadado < >
- Estas celosa- me confirmó y yo sólo abría en grande mis ojos ante su confirmación
- Claro que no!-
- Claro que si!-
- Que no!-
- Que si!-
-No-
-Si-
-No!-
- No-
- ¡Que Sí! y punto- grité desesperada y