Capítulo 37

Aquella voz en el teléfono le causó a Sandro una sensación extraña y le removió recuerdos que había sepultado dentro de sí. Intentó mantener la ecuanimidad mientras respondía al cariñoso saludo de la mujer.

—¿Realmente eres tú, Elisa?

—“Por supuesto, Alessandro, claro que soy yo, no te sorprendas tanto, que tampoco es que soy una extraterrestre”

—Disculpa, me sorprende mucho tu llamada.

—“Imaginé que así sería, pero voy a estar en el país unos días y me gustaría verte”.

—Por supuesto, me encantaría. Dime cuándo podemos vernos.

—“¿Podría ser hoy, que estaré desocupada? Tengo varias reuniones pautadas y no sé cuándo volveré a tener tiempo libre. Estaré en el hotel en una hora quizás. Estoy en el aeropuerto”.

—Por favor, dime que te quedarás en alguno de nuestros hoteles. Déjame arreglar todo para tu alojamiento y te confirmo. Enviaré un chofer a buscarte y te esperaré en el hotel.

—“No tienes que tomarte tantas molestias, Alessandro, puedo tomar un taxi”

—No lo permitiría jamás. Espera
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App