- Hola Hermana, hace tiempo que no la veo ¿Por qué está tan segura de que iba a venir?
- Es que, digamos que me lo contó un pajarito (sonríe de forma amable).
- Hermana, ¿puedo preguntarle algo?
- Sí Lía, dime.
- ¿Usted recibió bendiciones de algún Santo o tiene dones otorgados por el creador?
- Pues compartiré contigo mi pequeño secreto ¿Te parece?
- Sí, estaría más que feliz en saber, agradezco la confianza que depositas en mí.
- No tienes nada que agradecer Lía, cuando tenía tu edad me hubiese encantado tener una mentora. Con respecto a mi secreto, tiene relación directa con dones que me fueron otorgados en el día de mi nacimiento al igual que a ti, puedo comunicarme con los ángeles Lía. Me avisan de ciertas situaciones ya sean de riesgo o futuros acontecimientos positivos. Por ejemplo, el día de tu nacimiento una especie de ángel se me apareció horas antes de que nacieras, tiene un particular apego hacia ti ese ser y no es un ángel cualquiera, Azrael es su nombre.
- Sí, es un amig