diecisiete.

Florencia:

Miro a mi pequeña que ya tiene un mes y no puedo creer lo parecida a su papá que es.

Su cabello negro, su piel un poco bronceada, salvo el color de sus ojos que son como los míos, celestes con motas de verde, tienen el mismo color del lago donde me entregue a su padre la primera vez.

— Nuestra hija será la más hermosa de esta ciudad. — dijo llena de orgullo.

— Ella es la más hermosa, del mundo y si aprende a cantar como la madre ... grr tendrá a demasiados pretendientes detrás de ella. — La cara de sufrimiento de Leonardo me daba mucha risa.

— Sabes, ella es tan hermosa... que nadie se puede resistir cuando la ve, mira incluso Alexander que juro que jamás la tomaría en brazos hasta que no sea más grande y " resistente" anoche no había forma de que la dejara en su cuna, alegaba que se despertaría, como si no notáramos que estaba embobado mirándola.

— ¡Eso es! Ponle el vestido más hermoso que tenga, iremos a ver a mis padres.

— ¿Que? ¿Estás seguro que sea una buena idea?

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo