65. Nunca hubo compromiso
Capítulo 65
El auto se detuvo frente a la imponente entrada. El mayordomo Daniel abrió la puerta con la precisión de siempre, pero sus ojos notaron la cercanía cargada entre sus dos huéspedes. No dijo nada.
Jazmín bajó primero. Su andar era sereno, como si la noche hubiera sido una velada tranquila. Pero Nathaniel sabía que cada paso que daba estaba lleno de tensión contenida.
Él la siguió, caminando un poco detrás, observándola en silencio.
—Gracias por acompañarme —dijo ella al llegar al vestíbulo. Su voz era tan impersonal como podía fingirla.
—Gracias por aceptar la invitación —replicó él con una sonrisa apenas insinuada.
Jazmín lo miró un segundo, sus ojos grises tan afilados como siempre.
—No lo acepté por ti —susurró, y comenzó a subir las escaleras.
Nathaniel no la detuvo. Solo la siguió con la mirada mientras se perdía en la planta alta.
Y aunque no intercambiaron ni una palabra más, ambos sabían que la noche no había terminado.
Solo estaba en pausa.
Nathaniel subió a su auto