Capítulo 39

El perfil era impresionante. Sus pómulos tenían una forma perfecta. Estudió cada parte de su rostro como si fuera una obra de arte, hasta su rostro arrugado era atractivo.

―No me estás haciendo caso ¿verdad?

Cuando Henry se volteó para mirarla, Emma se recompuso. Se había quedado admirándolo completamente distraída mientras él se preocupaba por ella. Estaban sentados en las sillas junto a la piscina. Sus tumbonas estaban juntas y, aun así, ella se había sentado de lado para tenerlo de frente.

Henry frunció el ceño confuso al descubrir que sí ella se había distraído y no había escuchado nada de lo que había estado comentando. Emma se aclaró la garganta y fijó su mirada en el iPad que llevaba él en las manos.

―¿Decías que tienes cámaras dentro y fuera del patio? ―ahora que lo repetía, se daba cuenta de lo que eso implicaba. Viajó la mirada por los alrededores, en las zonas en las que posiblemente se ocultarían las cámaras. ―Madre mía, ¿eso quiere decir que no puedo estar tranquila aquí
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App