Andrés la miró y supo por su expresión que ya estaba al tanto de la situación.
Pero ella no lloró ni armó un escándalo, simplemente le trajo su ropa y lo ayudó a vestirse.
Andrés la abrazó fuertemente y dijo con voz grave: —Vendré a buscarte en Navidad. Espérame.
—De acuerdo—respondió Julia, sin saber qué más decir.
Se sentía ansiosa, inquieta y afligida, pero no podía hacer nada. Solo le preocupaba que algo le hubiera pasado a Pilar.
Si algo le ocurría a Pilar, entonces ellos dos...
Julia no quiso seguir pensando en eso. Bajó las escaleras y observó el auto de Andrés alejarse en la oscuridad de la noche.
Después de que él se fue, Julia no pudo dormir.
El abrazo familiar ya no estaba, y hasta la temperatura parecía haber bajado...
*
Andrés llegó a Sinata al amanecer.
Quedó atrapado en el tráfico durante dos horas y recién a las 9 de la mañana pudo llegar a la residencia de Pilar en la Bahía Sinata.
Luis le dijo que Pilar insistió en salir del hospital y no pudo detenerla.
Andrés se sen