Carlota.

-” Deja todo lo que estes haciendo, ahora mismo, Finlay ha enviado su jet a recogerte, en dos horas despega, tienes que venir ya, para controlar a Murray, o el próximo lugar donde lo vas a ver no será precisamente en una pantalla de cine, más bien en una celda de dos por dos, en una prisión inglesa de alta seguridad, por asesinar al cerdo de Montgomery.”- ese fue el mensaje de recibí de Ailan, y que me hizo reaccionar.

Anteriormente me habían llegado miles de llamadas y mensajes de Roci que yo no había podido atender, y todo por culpa del estúpido de Gavin Conway, llevaba dos días que había tenido que lidiar con varios escándalos de faldas de ese estúpido, para que no llegaran a la prensa, en ocasiones como esta, echaba de menos mi anterior representado, Murray Campbell, y no sólo porque es el hombre que amo, sino porque, además, en este tipo de cosas sucias, nunca me daba problemas, su singularidad artística tenía que ver más con su maldita forma de ser caprichosa, y altiv