Narrador.

-” ¿Se puede saber qué demonios le ha dado a tu cuñado, Connor MacLeond?”- le preguntó Oliver Twist a Finlay, mientras veía las imágenes de las cámaras de seguridad del pasillo del Club social Green Villa, que Oliver exigió ver, cuando entró en tromba, y furioso, en su despacho, mostrando una clara indignación.

En ellas se apreciaba como claramente Marcus Miller, el hermano más pequeño de su esposa, se había tomado algunas confianzas con la pequeña Daisy Lascalles, y que, para el gran CEO escoces, dueño de M.F.P. Global Multinacional, no se le pasó desapercibido que, a pesar del enfado inicial al verse abordada por su intrépido cuñado, las protestas, durante el beso, de la antigua dama de la sociedad de los Lascalles, fueron casi nulas, en contraposición con su reacción de furia desmedida, tras ser rechazada por su asaltante, posteriormente. Pero eso no lo pensaba destacar el gran gladiador escoces, ya que sabía que, para Oliver, por lo que significó la pequeña Daisy en su i