Murray.
-” ¡Eres un gilipollas! Prepárate para la paliza que te voy a dar en cuanto te tenga enfrente, maldito Sean Connery.”- fue el primer mensaje que recibí esta mañana de un más que cabreado Finlay, después de una noche que no dormí mucho, y bebí demasiado.
No hacía falta que Connor MacLeond me machacara, ya lo hacía yo lo suficiente, la verdad es que, la noche anterior, tanto Conway como yo quedamos como auténticos idiotas, al enterarnos que esa enloquecedora mujer, nos había dejado tirados, con la única explicación de un demoledor mensaje, que no admitió respuesta por nuestra parte porque, esa desesperante mujer, apagó su móvil, para no ser localizada.
El mensaje llegó a nuestros móviles al mismo tiempo, mientras Conway y yo, y en medio de nuestro enfrentamiento verbal, la buscamos como locos en la gala, así como en el hotel que se hospedaba. Definitivamente, mi Caramelo Didi sabe cómo hacerte enfurecer, al mismo tiempo que te hace quedar como el más estúpido de los hombres.