Capítulo 91. ¿Estás enamorada de él?
La amargura en el pecho de Isabella se hace más evidente a medida que transcurren las horas. A pesar de que intenta enfocarse en sus tareas, no puede evitar que su mente vuele hacia el mismo lugar una y otra vez: la oficina de Benedict.
Alessia está allí. Encerrada con su esposo desde que llegaron. Ninguno de los dos ha salido.
Nadie sabe lo que ocurre detrás de esa puerta, pero Isabella imagina lo peor. Y aunque intenta convencerse de que no le importa, que ese hombre ha hecho más que suficiente para ganarse su desprecio, el nudo en la garganta no desaparece.
Se da golpes en la cara mentalmente por ser tan idiota, por dejarse afectar por algo que no debería dolerle. Pero es inútil. La opresión en el pecho crece cada vez que piensa en lo que pueda estar pasando entre ellos.
Alessia es una arpía, eso lo tiene claro desde siempre. No hay otra palabra que la defina mejor. Una manipuladora profesional, capaz de cualquier cosa con tal de conseguir lo que quiere. Y Benedict… él es capaz de