Capítulo 37 —Yo no soy tu esposa, ella sí
Narrador:
Charlotte llevaba un vestido entallado en tono marfil, un recogido impecable y el tono justo de perfume que dejaba rastro sin invadir. Sonrió. Primero a Margot, luego a Desirée, y por último... se acercó a Cédric.
Sin pedir permiso, sin necesidad de gestos dramáticos, le tomó el brazo como si ese lugar le perteneciera por derecho. Él no se apartó. Al contrario: se acomodó a su lado con naturalidad, la dejó aferrarse y le susurró algo breve al oído que provocó una carcajada elegante.
Desirée sintió el impacto directo en el estómago. No fue celos. No exactamente. Fue rabia. De esa que se enrosca en el pecho como una cuerda tensa.
La sonrisa de Charlotte. La postura de Cédric. Esa actuación tan perfecta que le dieron ganas de aplaudir... o de romper algo.
—Queridas —saludó Charlotte, acercándose con Cédric aún tomado del brazo —Me alegra tanto tenerlas esta noche. Especialmente a ti, hija. Significa más de lo que imaginas.
Desirée no r