Capítulo 123 —El complot
Narrador:
Desirée mantenía los dedos aferrados a la carpeta con fuerza. No la abría todavía. Su mirada no estaba en los papeles, sino en Cedric, que la observaba en silencio.
—No es que te esté creyendo. Pero si esto es verdad… si todo esto es cierto… entonces ¿por qué carajos se dejó inculpar?
Cedric bajó la mirada, respiró hondo y se sentó frente a ella sin invadir su espacio.
—Porque estaba en shock. Porque tenía la imagen del hombre que amaba muerto frente a ella. Porque la policía la trató como culpable desde el primer segundo. Y porque el abogado que le asignaron formaba parte del engranaje.
Desirée frunció el ceño, confusa.
—¿Qué estás diciendo?
—Que ese abogado le prometió sacarla en dieciocho meses con un trato favorable. Pero nunca fue su intención cumplirlo. Se vendió al directorio. Jamás presentó pruebas clave. Su defensa fue un desastre deliberado. Y cuando llegó el momento del juicio, le ofrecieron un acuerdo: diez años sin derecho a apelaci