Capítulo 107 — Sí te quiero
Narrador:
Ambos comenzaron a vestirse sin apuro, en medio de ese silencio espeso y cómplice que queda después del deseo satisfecho. Desirée se acomodó la ropa interior, recogió la blusa del suelo y se la puso sin abrochar del todo. Cédric, de pie, se cerraba el pantalón mientras la observaba con una media sonrisa. Aún tenía el cabello alborotado y el pecho descubierto, respirando con lentitud.
—¿Te molesta si me quedo así un rato? —preguntó él, señalando su camisa abierta.
—No —respondió ella, con una media sonrisa —Mientras no vuelvas a provocarme justo cuando acabo de dejar de temblar, pues sabes que adoro ver justo ahí... tu clavícula.
Él rió bajo. Se sentó en el sillón de su consultorio y abrió los brazos en un gesto casi instintivo.
—Ven.
Ella lo miró. Dudó un segundo. Luego caminó hacia él y se sentó a horcajadas, con una pierna a cada lado de sus muslos, apoyando el peso de su cuerpo sobre el suyo. Cédric le rodeó la cintura con ambos brazos, con nat