Noah en medio de su frialdad supo que esa era la oportunidad perfecta para poder pisotear a Emily, y tenerla en sus manos; lo que pasaba por su cabeza por supuesto no era nada bueno.
—Está bien, te prestaré el dinero —Emily marcó una leve sonrisa en su rostro, su madre era lo más importante, y poner su vida a salvo era lo más le importaba.
—Muchas gracias Noah, en verdad te agradezco lo que has hecho —Noah levantó la mano indicando que se detuviera—. Te voy a pagar hasta el último peso.
—No es un favor, a partir de mañana serás mi asistente, soy un hombre exigente en los temas relacionados con el trabajo, así que si aceptas trabajar para mí tendrás que tener muy claro que no es un juego, la responsabilidad ante el más mínimo error caerá sobre ti.
«Dos pájaros de un mismo disparo, William estará orgulloso de mí, al ser su asistente será más fácil poder sabotearlo todo y acabar con Noah; y al mismo tiempo, podré sacar provecho para pagar el tratamiento de mi madre», pensó ella observa