Alan fue a la mansión y se encerró en la biblioteca. Al rato llegaron sus padres.
—¿Dónde está Alan? —preguntó Hector a la mucama.
—El joven se encuentra en la biblioteca. —En eso Alan llegó a la sala con la intención de marcharse a la clínica.
—¿A dónde se supone que vas? —preguntó Hector.
—Voy a ver a Lauren, no pienso permitir que Jeremy haga con ella lo que le venga en gana. —Alan se dirigió hacia puerta, de pronto Vera le dijo:
—Ella ya no quiere estar contigo, consideró bien las cosas y decidió reconciliarse con Jeremy. —Alan volteó a mirarla.
—Eso no es cierto.
—Ella misma me lo dijo, Jeremy es el padre de su hija, a ella le parece muy oportuno que su hija crezca cerca de sus padres.
—No te creo, si es cierto, que ella misma me lo diga.
Alan les dio la espalda y salió de la mansión, Hector fue detrás de él.
—Alan por Dios, deja a Lauren en paz.
—¡No dejaré que se la lleve!
—No estás pensado con la cabeza.
—¿Entonces qué hago? ¿Dejó que se la lleve así no más?
—Hijo no puedes de