4 semanas después
Anni y Ethan habían viajado de nuevo a Italia, para visitar a todos después de lo que había sucedido con Greta. Anni tenía pensado quedarse hasta que naciera el bebé.
Ethan le llevó a Lauren un regalo, le entregó una bolsa con motivos infantiles cuando estaban a solas.
—Te traje esto. —Ella sonrió y recibió el regalo.
—Gracias. —Lo abrió, dentro había un oso de felpa y un sobre blanco.
—El oso es para el bebé, y el sobre es para ti, quiero que leas una carta que te escribí.
—Una carta.
—Si.
—Ya nadie entrega cartas.
—Aun sigo chapado a la antigua.
—¿Puedo abrirla de una vez?
—Las cartas es mejor leerlas a solas, pero esta es para cuando nazca tu bebé. —Lauren volvió a sonreír.
—Gracias.
—No tienes que darme las gracias —La agarró de ambos brazos y la miró a los ojos sin guardarse sus pretensiones—. Quiero ser el padre de ese hijo que esperas.
—¿Qué estás diciendo?
—Estoy enamorado de ti Lauren, y voy a luchar por ti. —Lauren se apartó de él.
—No debes luchar por mí