POV Adam
Encontrar a Emma fue difícil, pero verla así inconsciente, peor aún deshidratada e insolada y con fiebre, me hizo enfurecer, todo esto no habría sucedido si los estúpidos de mis hermanos no se hubieran metido con ella.
Le pedí al médico que le realizara algunas otras pruebas, tal vez Emma podría tener alguna otra infección en la piel o estar resfriada por estar en el estanque helado y me sentiría responsable si algo malo le sucediera por eso. Este tomó muestras de sangre, saliva, revisó sus pupilas, sus uñas, cabellos, todo. No quería que nada se le escapara o me molestaría y molesto no soy nada amistoso.
Estaba cansado pero decidí quedarme aquí, Emma no tenía a alguien que cuidara de ella, al parecer su único conocido era yo. Verla en esa cama tan vulnerable me hizo sentir ternura, si no fuera gorda su madre la trataría como a una princesa y no dejaría que ni el viento le soplara, en cambio, Emma caminaba bajo el sol y comía sopa instantánea en tiendas de autoservicio porque