Por Alice.
Realmente estoy hechizada por Alberto, él me subyuga, me domina, me encandila.
Pero… algo, luego de la conversación con mis primos, y como prima también la incluyo a Mirta, aunque no somos primas, pero aparte de ser mi mejor amiga la siento mi prima.
Algo me decía que no podía acceder tan fácilmente.
Sí, creía que mis primos estaban equivocados, sin embargo, no podía imaginarme viviendo sola allí, mientras él se ausentaba por semanas.
Las dudas crecían y también el entusiasmo por casarme con el.
Eran sensaciones encontradas.
Esa noche me dije que tenía que tranquilizarme y que lo mejor sería que hablara con Alberto.
Yo lo consideraba perfecto, era trabajador, por más que mi loca cabecita estuviera pensando de dónde sacaba tanto dinero.
No sé como se manejaban los empresarios.
Pensé en los dueños de la empresa en dónde trabajaba y sí, ellos también alquilaban yates, y tenían vacaciones en el Caribe.
Hasta viajaban a Europa.
Esa gente tenía muchos privilegios y posiblemente A