Samanta se sobresaltó por el movimiento, descubriría lo que llevaba bajo esa bata y ahora se arrepentía de como se vistió.
- Dan… espera…- la bata se abrió sin poner resistencia, trató de taparse con un brazo el pecho.- ¡No mires!- no quería que viera su ropa interior.
- Si me lo dices así, tendré más curiosidad.- sus ojos brillaron con lujuria.
Samanta se paro y se apoyo en el escritorio.
- ¡ No pienses mal…- dejó caer su brazo con el pecho acelerado.- Pensé te gustría...
- ¿ Puedes quitarte la bata?- le dijo desde su asiento, evidentemente estaba disfrutando la escena.
- Sí…- cerró los ojos y dejó caer la bata sobre la mesa, después de unos eternos minutos, Samanta preguntó -¿ Puedo ya ponérmela?-
- No.- Se levantó de su silla y se pegó a Samanta.- Esto era para mí… quiero disfrutarlo un poco más.-
Se arrepentía de lo que llevaba puesto, lo compró un día convencida por Jesse, le dijo que a Daniel le gustaría verla con eso, no le