No quiero que maten al hombre que tanto miedo me produce, aunque él desee lo contrario en mi hijo y eso es porque yo actúo diferente al hombre que carece de piedad.
— Vamos a esforzarnos por salir de aquí y preparar el viaje, dejemos todo esto atrás y tengamos un nuevo comienzo. — pido y ella asiente.— Está bien, hagámoslo así. — dice ella con incredulidad.— No nos desesperemos y…— ¿Qué le vamos a decir al jefe? — pregunta una voz masculina y por eso, miro hacia arriba comprendiendo que la pared que divide los baños, no está hacia arriba como las demás paredes.De inmediato, cubro mi boca y pienso seriamente sobre lo que hablé y que pudo comprometerme, por lo que pienso lo peor que puede suceder debido a mi imprudencia, porque yo tuve que asegurarme primero que ellos no eran capaces de escucharme antes de hablar.