POV: Dante
El correo de enfermería sale de mi bandeja antes de que ella lo reciba.
“Asunto: Control médico – Vega. Favor presentarse en enfermería, piso 15. Instrucción registrada desde Dirección.”
Cuatro líneas. Las suficientes para que parezca protocolo, no interés personal.
Cierro la ventana del correo y, por un momento, solo escucho el zumbido del edificio. Noir Tower respira distinto desde que Aurora entró. No es poesía: es química.
El interfono parpadea.
—Señor Noir —dice la voz de Andrade—. Lamento molestar, pero tuvimos otro… incidente menor con la señorita Vega.
Sabía que iba a pasar.
—Defina “incidente” —respondo.
—Mareo de nuevo —explica—. Se levantó de su puesto, fue hacia la salida de emergencia. La analista del cubículo contiguo la siguió. No hubo desmayo, pero… no se ve bien.
La “analista contigua”. La beta sensible.
—¿Está trabajando ahora? —pregunto.
—Está en la escalera de servicio —dice—. No ha vuelto todavía al piso.
Miro la hora.
No han pasado ni cinco minutos des