¿Cómo te atreves?
Apryl
He estado preocupada desde esta tarde, tengo un mal presentimiento. No puedo entender por qué. ¡Sin embargo, todo va bien! Recuerdo esta mañana, cuando fui a buscar mi prueba de embarazo para hacerla. Tengo un retraso de una semana, cuando yo soy puntual como un reloj. Me desperté muy temprano, Alberto aún no se había despertado. Estaba en la ducha esperando los resultados cuando él entró.
- ¿Qué tienes? Te ves preocupada.
- No, estoy bien, estoy bien.
Tomo la prueba que miro, veo las dos líneas. Estoy realmente embarazada.
Estoy realmente embarazada.
- ¡Mi tigre, estoy embarazada!
Él me mira, como si no entendiera. Luego sus ojos se iluminan:
- ¿Tú... vamos a tener un hijo?
Él me levanta y me besa apasionadamente. Yo respondo a su beso. Nos separamos y le pregunto preocupada:
- Espero que te haga feliz.
- Por supuesto, ¿por qué dudas de eso?
- No quiero que pienses que te estoy forzando.
- Claro que no, estoy muy feliz de ser papá nuevamente.
- ¿Nuevamente? ¿T