Los ojos de Brenda brillaban emocionados, ella nunca antes había visto un hombre tan atractivo y tentador, ahora tenía que considerar seriamente tener que contratar un gigoló también para ella.
— Mucho gusto, ¡Soy Brenda! — Estiró la mano hacia Patrick, quien le sonreía con amabilidad.
— Es un placer conocer a una amiga de mi hermosa Nicole y además, la persona responsable de que nos conociéramos. — Contestó Patrick, apretando la mano Brenda.
Pues ya Nicole le había hablado un poco de su amiga antes, y él ya sabía que fue Brenda la que ideó el plan del gigoló contra el exesposo.
— Deberíamos brindar y celebrar este encuentro, vamos, las invito al mejor restaurante de la ciudad para almorzar. — Completó Patrick.
Estos gigolós debían ser muy bien entrenados y preparados, pensaba Brenda al tiempo que charlaba con la pareja, Patrick era amable, atento, respetuoso, inclusive el tono de su voz y la forma de moverse parecía muy bien estudiada.
Él no parecía un tipo cualquiera, sino un