19. TRABAJO EXTRA
EL
Podía oler el cóctel de emociones que llevaba Camellia dentro, fue difícil verla luchar contra su naturaleza. Es más fuerte que yo, ella aun seguía luciendo humana. Yo habría perdido la batalla para este punto.
Cuando se aferró a mi saco y me pidió que me fuera, solo podía oler preocupación. Y los susurros fantasmales solo llegaban ecos.
“Lo puedes lastimar, dejalo ir”
“Dejalo ir”
-No me iré, es ¿Hambre?, ¿Ira?; dime que necesitas .- prometí que haríamos esto juntos, voy a cumplir mi palabra.
“Necesito coger”
El susurro fue más bien un grito en mi mente. Sabía que necesitaba cazar no follar como animales, no llegaríamos lejos en esta condición; sólo podía ofrecerle una clase de liberación en estas condiciones.
-Levántate el vestido. - quería ser amable pero no había nada tierno en mi demanda. Lo haría aquí como un maldito animal si fuera necesario.
-¿Qué? .- la expresión escéptica fue un alto total. Me incliné y la tomé por el trasero para levantarla. Su hermoso vestido corrió por