Capítulo 105
Santiago me tomó de la mano apenas terminó el evento, se dio cuenta de mi nerviosismo que la verdad no podía ocultar, Notó que estaba inquieta, lo miré seria, y lo jale a un lado del escenario
—La vi, Santiago, esa mujer... ella estaba ahí. Era Clarisa, esa mujer estaba viva
Él negó de inmediato con la cabeza, me agarró de las mejillas y me pidió que lo mirara a los ojos, el necesitaba que yo reaccionara.
—No, Luisa, mírame mi amor, eso no puede ser, Clarisa está muerta, Seguramente fue tu imaginación, producto del cansancio y del estrés, ella no existe mi amor.
—Yo la vi —insistí, con la voz temblorosa, era imposible que mi cabeza me jugara una pasada tan real.
Me abrazó fuerte, me besó en los labios y me acarició la mejilla con esa dulzura que me derretía
—Yo estoy aquí, contigo —Me hizo ver hacia donde estaban los invitados —No hay nadie, solo la gente que ama, el reflejo de tu éxito.
Respiré hondo y asentí, No quería discutir, quizás el tenía razón, solo fue el ref