Capítulo 14: Como usted diga, señor.
Fin de semana. Victoria deseaba dormir hasta tarde, pero un mensaje de Bianca le recordó que debía ir al salón para tomar unas clases de pasarela y probar el maquillaje natural que le estaba ofreciendo. En verdad, no tenía ánimos de nada, ni de ver a nadie, y mucho menos esas clases de pasarela y maquillaje. Sin embargo, sí deseaba, por sobre todas las cosas, aprender todos los truquitos para verse siempre bella y fresca. Se preguntaba si debía ir hasta la estación de policía y denunciar al hombre que la atacó. Era un peligro para la sociedad, podría agredir a otras mujeres. Tenía que hacerlo, pero lo único que recordaba de ese horrible hombre era un tatuaje en la mano izquierda de un dragón. Les diría a los agentes sobre esa marca, para que lo buscaran o, al menos, hicieran algo contra esos hombres peligrosos.
A pesar de no gustarle las clases de pasarela, se divirtió mucho. Fue sacada de su aburrimiento y de sus pensamientos sobre el ataque. Además, la policía dijo que investigaría