Capítulo 50. •Bría•
Centro de Berlín- Alemania.
Alessandro De Andes.
—Señor, tenemos una dificultad
ahora mismo— Dejé salir el humo del cigarrillo dentro de mi boca. Problemas y más problemas. ¿Cuándo podría tener un poco de descanso?
—¿De qué Mierda hablas?
— Es sobre Anthony. En su ausencia quebrantó varias de sus reglas, dobló un par de negocios en el occidente y se deshizo de dos socios chinos— Aprieto mi puño con fuerza. Sabía que tomaría parte de su poder como socio del corporativo y dinastía, para hacerme cabrear.
— Arreglen su desastre. Ya me encargaré
de él—. Le tenía un final bastante satisfactorio a mi querido medio hermano. Era un dolor constante, del cual, ya no estaba dispuesto a soportar.
— Además de ello— Roan, mi jefe de seguridad hace una mueca. Me está ocultando algo.
—Habla ya.
— Al parecer, tiene secuestrada a una joven en las casas del sur. Es la hija de Ángelo— Me puse de pie separando la silla giratoria de mi escritorio. Esto debía ser una jodida broma.
— ¿Por qué no se me infor