―A mi despacho. ―Se marcharon dejando a Karman echándose aire con la mano.
¿Cómo puede ella desear tanto a un hombre que odia? ¿Acaso ese embarazo está por matarla de las ganas? ¿Por qué su jodida libido se activa únicamente cuando ese hombre está cerca? Con la cabeza grande y su coñ0 empapado, se