Capítulo 35: El baile turco.
Sheila siente un fuerte mareo, le vuelve al cuerpo una extraña sensación de malestar, siente mucho vértigo y unas ganas enormes de vomitar. No tolera ciertos olores, llama de inmediato a la chica del servicio, para que se encargue del niño y lo lleve a la escuela.
Al instante, ingresa su esposo a la habitación en total silencio, fue a cambiarse la ropa para seguir con su jornada laboral, percibe la palidez en Sheila y se arrima preguntando:
—¿Te sientes bien?
—No, tengo muchas ganas de vomitar y siento que todo me da vueltas.
—Déjame tomarte unas muestras, y las mando analizar en el laboratorio.
—No es nada, seguro es el estrés.
—Estás muy pálida, soy médico yo me encargo. Tomate el día y descansa.
Daniel se queda un poco pensativo, insinúa mentalmente que el malestar en Sheila puede obedecerse a un embarazo, justo ahora que su matrimonio ha comenzado a tambalearse. Se asoma una ligera duda en su cabeza motivada por los celos, sin embargo, la razón le indica de inmediato que, de estar