Capítulo 109; Venganza consumada.
—¡KLAUS, AYÚDAME, AYÚDAME, POR FAVOR!...— gritaba y sollozaba Annette. Amaia entr´´o a la jaula y un par de hombres metieron a su adversaria para luego cerrar la jaula.
—¡POR FAVOR, NIKOLAY, DÉJALA IR!— gritaba Klaus.
—Ya escuchaste a Amaia, si quiere irse, debe ganar.— sentenció sonriendo. Los presentes se acercaron rodeando la jaula para ver le espéctaculo.
—Yo que tú me quitaría el vestido y los tacones, son incómodos para pelear y más sabiendo que de esta pelea depende tu vida. La barbilla de Annette tmbló y se quitó los zapatos de tacón alto.
—No me quitaré el vestido frente a todas estas bestias.— estaba terriblemente asustada.
—Como quieras— se encogió de hombros— Voy a cobrarte mi secuestro, el atentado y la muerte de mis hombres... vas a morir mientras Klaus suplica por tu vida. — Nikolay sonrió orgulloso, aquella Amaia en la jaula no se parecía en nada a la debil Amaia con la que se había casado.
¡Le encantaba su reina!
¡Amaia se había covertido en la esposa perfecta!
¡E