Cap. 40 Sin salida
El corazón de Acsa se hallaba destrozado, tenía que hacer algo para impedir que su familia corriese peligro, Ilena le propuso:
—¿Y si huimos?
—Tendré que hacerlo, no puedo quedarme aquí y dejar a ese par de locos con mis hijos.
—Aunque Abner es peligroso, sabemos que su cordura no es buena, lo acaba de demostrar al sacar a Astrid y ponerte como su reina.
—Tenemos que hallar la forma de salir de aquí esta misma noche.
—Buscaré ayuda…—le aseguró.
Entonces fue donde su madre que al verla se emocionó mucho y la abrazó:
—Juraba que te había perdido para siempre, Ilena.
—Madre, necesito tu ayuda, debemos sacar a Acsa de esta locura.
—Hay un grupo de rebeldes que está deseoso de actuar, mataron a sus hijas y fue terrible.
—Esta noche necesito de su ayuda para sacar a la reina de aquí y los bebes.
—Cuenta con nosotros, hija…
Abrazó a su hija con fuerza y ahora que tenían ayuda seguía el resto del plan.
La ira de Astrid
Cuando le abrieron la puerta, Astrid salió dando maldiciones