Unos días después:
La observo mientras le da su clase a Danko y solo puedo sonreír al ver como él le hace caso. Me pidió que me quedara lejos un tiempo mientras que ella le enseñaba algunas órdenes y haciéndole caso, la observo desde la reposera.
—Hermanito. — Me sorprende Cintia y se sienta en la reposera de al lado.
—Cin, ¿Y las niñas? — Pregunto.
—Han salido con mamá. — Explica.
—Ah vale... —
—Tienes una cara de enamorado... — Comenta y sé que se está burlando de mí.
—Parezco un idiota, ¿no? — Le pregunto riéndome de mi mismo.
—Digamos que si... —
—Es que es tan hermosa, tan inteligente... además te juro que la veo con Daniel y muero de amor. — Explico.
—Es una muy buena mujer. Sabes, me pone m