Con un golpe sordo caigo al suelo una vez más.
Mis quejidos y maldiciones resuenan por todo el bosque.
Sí, bosque. Leí los libros de papá y todo lo que he conseguido hacer es que la magia explote en mi cara y llenarme de tierra e insectos.
-carajo-gruñi-
《Tal vez deberías dejar de intentar, no esta funcionando....》
Mi ceño se frunció.
-¿no eras tú la que quería que practicara más?¡llevamos 3 días en este vaivén y ahora quieres dejarlo!
《Solo decía, soy mayor que tú deberias respetar》
Me reí sin gracia.
-¿mayor? Mil disculpas ser milenario, estás en mi cuerpo y eso me hace ser la autoridad, tu edad no me es relevante.
La escucho quejarse pero ambas de pelear cuando empiezan a oírse pisadas a lo lejos.
Me levanto del suelo en silencio y retrocedo.
Estoy muy c