En un abrir y cerrar de ojos ya Maddy y Deyanira estaban decorando la casa de Navidad, luego de un noviembre muy agitado con las celebraciones de los cumpleaños, los trillizos estaban emocionados y revisaban todos los paquetes tratando de adivinar su contenido.
–Mamita, ¿estás segura de que aquí están los obsequios que los cuatro enanos pidieron en sus cartas? Porque a mí me parece que todo esto es solo lo que yo pedí –exponía Bayron.
–En primer lugar, deja de decirle a tus hermanitos los cuatro enanos, tendré que hablar con Alberto al respecto, él fue quien comenzó a llamarlos así y, en segundo lugar, ellos no escribieron ninguna carta porque todavía ni siquiera hablan.